domingo, 26 de febrero de 2023

En Colotlán saldrá a la luz compilación paleontológica

Por: José Alonso Serrano Campos

* Preparan video con todos los detalles, cuya presentación será en el Encuentro de Especialistas de CUNORTE este año.

En recientes hallazgos, personas de Colotlán han encontrado fragmentos óseos de grandes animales que habitaron la región hace miles de años y cuyos restos petrificados han sido recopilados para su análisis.

Estas evidencias han servido para dar inicio a procesos de investigación que podrían dar más claridad al origen de esta basta región occidental entre los estados de Jalisco y Zacatecas. Por medio de la paleontología se tiene como objetivo estudiar el registro fósil de estas piezas descubiertas para reconstruir la historia de la vida y podría dar mayor información sobre el pasado de estas tierras.

Se considera que los fragmentos encontrados pertenecieron a animales de unos 13 mil años, dando prueban de la riqueza paleontológica del norte de Jalisco, una zona accidentada, con perfil agrícola donde a menudo los restos están en manos de pobladores y sin conservación. 

Colotlán hace miles de años era un lago donde todos estos animales quedaban varados, algunas osamentas de mastodontes recientemente encontradas fueron dejadas por los cazadores antiguos que vivían en las cuevas de los cerros de Santiago, San Nicolás y algunas otras aledañas; tenían su comida y agua asegurada en las partes bajas de la zona donde se podrían concentrar muchos de estos animales.

Los primeros asentamientos humanos se deben a la presencia de dichos mastodontes, el valle de Colotlán sería un vaso lacustre formado por el escurrimiento de los cerros con altas probabilidades de supervivencia para aquellos primeros pobladores.

Este tipo de vestigios existen en la región dispersos por una zona limítrofe que abarca la cabecera municipal, al tiempo se han descubierto animales más completos en las márgenes del rio y uno más encontrado cerca de la gasolinera por la salida a zacatecas.

Además, se han encontrado vértebras de vacunos petrificadas como las de un bisonte que podría llegar a pesar entre 3 y 5 toneladas y un colmillo plano que podría pertenecer a un animal conocido como “dientes de sable”. Por el dibujo y la anatomía comparada se podría determinar que se trata de uno de ellos, pero falta la demostración científica mediante pruebas de laboratorio por parte del INAH.

En 2020 Ricardo Urista Alvarado hizo caminatas para restaurar su salud a consecuencia del COVID-19 y en una de estas por el rumbo del fraccionamiento Las Golondrinas se topó con restos ocios, concretamente con una parte de la tibia de un mastodonte, en su regreso recordó desde su niñez cuando por primera vez en la escuela algunos compañeros llegaron con un hueso similar, la maestra Esther Vázquez Felguerez y otros docentes de la “escuela de niños” hicieron como proyecto un museo escolar.

Varias personas le habían mostrado evidencias de huesos petrificados al maestro Urista, de al menos 20 sitios y objetos similares, por lo que se dio a la tarea de documentarlo y recuperar algunas piezas para investigar y motivar acerca del tema a más pobladores.

En su recuento, hace referencia a los descubrimientos que hicieron varios vecinos como Ignacio Iturriaga en 1978, encontró en una huerta frente al río una mandíbula y fragmentos de una osamenta de enormes dimensiones; Rubén Márquez en la mezquitera, encontró huesos que incluso en tiempos del alcalde Fabio Ruiz Ortega fueron notificados al INAH; otra osamenta con colmillos de más de dos metros de largo, quedaron registrados en un periódico local del tiempo de Alberto Soria que hacía su impreso en Colotlán, un trozo de ese fósil formó parte de aquel museo escolar de la escuela “Niños Héroes” en que Ricardo Urista participó.

En tortugas, rumbo a San Nicolás, Catarino Núñez Flores en 1984 encontró dos colmillos de un mastodonte, al año siguiente también descubrió huesos en el cerro de Las Golondrinas, camino al Saucillo se encontró un sitio de distintos fragmentos grandes aún por examinar.

En 1985 Hugo Orozco Valdez y Azael Ku Ramos por el camino a Los Bajíos encontraron un fémur y años después también otras piezas óseas; en 1990 Ezequiel Gutiérrez Antuna observó unos fémures de un animal de grandes dimensiones después de una creciente del rio que los dejó al descubierto por las márgenes del arroyo que desemboca al rio.

En años recientes Ramiro Vega Cárdenas mostró una piedra que encontró en Canoas rumbo a la Montosa, tiene una adherencia de un colmillo; para el 2003 Raúl Serrano Arenas encontró vértebras en el lugar conocido como Tortugas, así como un colmillo de mamut; en 2005 Catarino Núñez Flores, en el rio entre Santiago y Colotlán también vio vestigios, frente a la Preparatoria hubo otro hallazgo, quedando en resguardo de la misma prepa.

En los Veliz, Casallanta, El Pastor, Golondrinas, hacia el rumbo de la Normal, hay una serie de revelaciones que dan muestra del contexto de un tipo de fauna que pudo sobrevivir en la zona, los huesos de enormes y sorprendentes animales: Los gonfoterios, especie tropical o subtropical de los mamuts.

Estos enormes animales habitaron en Norteamérica durante los periodos terciario y cuaternario. Se estima que podían pesar hasta cuatro toneladas. Sus dos defensas superiores –rectas y sin banda de esmalte– erróneamente se perciben como colmillos; se presentan en el maxilar y a veces en la mandíbula.

La formación craneal del gonfoterio era alta como la de los elefantes actuales. De su periodo de vida se sabe que era muy similar al del ser humano y podía prolongarse en promedio hasta los 70 años. Era un herbívoro que contaba con eficientes molares para cortar y triturar ramas, hojas y tallos.

Otro Hueso petrificado hallado podría tratarse del Capibara, un gran roedor con patas cortas, con un tamaño aproximado a los 80 cm. En Jalisco ha sido hallado también en Zacoalco, Chapala, Atotonilco el Bajo y Tecolotlán.

La intención de difundir estos hallazgos es motivar a denunciar los sitios donde se han encontrado restos fósiles y quizá en un futuro no muy lejano hacer un museo, recomendando a la población dejar los huesos en el sitio y no destruirlos.

Falta confirmar mediante pruebas científicas que estos restos pertenecen a parte de la gran fauna que vivió en esta región hace entre 13 mil y 30 mil años, varios han quedado al descubierto por la erosión con las lluvias, por eso es importante dar aviso a los expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia para que le den seguimiento.

De acuerdo con la legislación mexicana, cualquier persona puede ser custodio del patrimonio arqueológico que encuentre en su casa, su jardín o cualquier espacio de su propiedad, previa autorización del INAH. No obstante, esta opción "no es lo recomendable" pues los restos tienden a deteriorarse o dañarse sin las estrategias de conservación adecuadas. Recuperar y mantener estas piezas es una manera de abonar al conocimiento de la historia y la geografía regional.




viernes, 24 de febrero de 2023

Anécdota del Torito Cabestro “Cabresto”

Esta es una fiesta del municipio vecino de Huejucar, Jalisco rica en tradición y leyenda que tiene la magia de transportarnos imaginariamente a los lejanos tiempos de nuestras raíces que datan de la década de 1730 (siglo XVIII) y por su contexto también en el inicio de cuaresma. Comparto un poco de su historia y anécdota que se irá enriqueciendo con el saber de propios y visitantes. 

El recorrido de este torito es desde el sitio conocido como la Hacienda de San Juan Nepomuceno (El Cuidado) al Barrio de San Pedro, donde se encontraba un ojo de agua (actualmente la presita del Barrio) y en su recorrido, como se dice, destrozaba las milpas de los indígenas, los cuales lo ahuyentaban de sus sembradíos, el animal al sentirse acosado de estas persecuciones fue obligado a encaminarse a los barbechos del poblado de Atotonilco donde estuvo perdido por varios días, pero iremos poco a poco narrando los hechos...

Aunque para el año de 1974 a 1983 y de 1988 a 1996, no fue posible la celebración de dicha fiesta ya que fueron extraviados los documentos del relato donde se encontraba la autenticidad de este acontecimiento (hoy leyenda).  Décadas atrás los habitantes del Barrio de San Pedro contaban con documentos que atestiguaban la posesión del torito cabresto; sin embargo, dichos documentos hoy se encuentran extraviados. Lo que ahora presento es gracias a datos proporcionados por algunas personas y documentos que al final menciono.

Para el año 2001 el entonces Presidente Municipal de Huejúcar ofrecía una gratificación de $5,000 a la persona que entregara los documentos extraviados  (SASJG, 2001). Se trata de un libro empastado con piel de cerdo, al cual, año con año le anexaban hojas cosidas con hilo, donde se escribían los pormenores de la fiesta y los nombres de quienes participaban.

Esta celebración es un testimonio del problema que las comunidades indígenas de toda la Nueva España comenzaron a padecer cuando se multiplicó el ganado mayor, ocasionando con ello la invasión de sus tierras y las subsiguiente destrucción de sus cultivos.

Su nombre es la fiesta del "Torito Cabresto", su origen y desarrollo son los que a continuación se mencionan, en profundo respeto a la diversidad de voces que lo cuentan a su estilo, versiones que se han ido adaptando a cada persona como lo cuentan con peculiar simpatía:

Por los años de 1730 se les extravió un toro muy bravo y ladino a los dueños de la Hacienda de San Juan Nepomuceno (El Cuidado) por el potrero de Cabral, pasando por los potreros de la Virgen, La Cruz y El Jomate. Al ser infructuosos los intentos de los hacendados para atrapar el toro, convinieron con los del barrio de San Pedro en obsequiárselo, con la finalidad de atraparlo y evitar que anduviera causando daños, en esta comunidad. 

Mediante ese acuerdo, se juntaron los vaqueros "de nuestro amo aquí presente" (se refieren al "amo" que representa al "antiguo amo") y empezaron la fatigosa contienda de capturar a dicho toro para lo cual empezaron a perseguirlo. El toro al verse acosado subió para el potrero de La Cruz donde le perdieron el rastro, pero los hombres entusiasmados por el desafío continuaron en su búsqueda, teniendo noticias de que había sido visto en el potrero de La Virgen. Entonces el amo despachó a sus vaqueros a cerciorarse de que esto era cierto, viniendo con la noticia de que ahí andaba el toro tan buscado.

En estas huertas los lugareños sembraban trigo, lechuga, cebolla y papas. Los dueños de esas siembras no hallaban qué animal los estaba perjudicando. Al darse cuenta de que se trataba de un toro bravo trataron de ahuyentarlo, pero el animal ya estaba “engrido” y regresaba constantemente, por lo cual se vieron obligados a darle la queja al dueño. Con este fin fueron comisionados algunos hombres de esta comunidad para hablar con él. El hacendado mandó a sus caporales para que se llevaran al animal a sus potreros, pero éste persistía en regresar y los hombres de esta comunidad de nueva cuenta volvieron a quejarse con el dueño. Así estuvieron batallando mucho tiempo: más dilataban en llevarse al toro que él en volver. El dueño, ya aburrido de recibir tantas quejas de los habitantes del Barrio de San Pedro les dijo: “les doy el toro si lo pueden atrapar”. 

Las personas a las cuales el animal fue donado, soltaron un par de toros "Cabrestos" por el rumbo donde andaba el toro para que éste se confiara, logrando así sujetarlo. El toro fue amansado y puesto a trabajar en el acarreo de piedra para la construcción de la Capilla, avisaron a los hacendados que el toro había sido encontrado y que los invitaban a una fiesta dada en su honor. Estos aceptan y acuden elegantemente vestidos y se les muestra al toro ya manso y dócil con un collar compuesto de flores y monedas de plata.

De la vecina comunidad de Atotonilco sale la comitiva arriando al toro y a los cabrestos con dirección al Barrio de San Pedro. Para ello es necesario pasar por diferentes lugares de Huejúcar, a donde llegan con los vecinos a pedir agua; de allí se dirigen a la placita del Barrio, llegando en la tarde a este lugar, por lo cual el amo muy entusiasmado y contento con sus vaqueros los recibió ofreciéndoles pulque y comida.

Ellos sintiéndose como quien dice en su casa, emiezan a torear y jinetear al toro hasta dejarlo completamente cansado; viendo esto el amo le ordena al caudillo, al caporal y a su secretario que llamen a los caporales uno por uno, para pagarles su fatiga, regalándoles queso y pan para su capirotada del día siguiente (miércoles de ceniza) e invitándolos a un baile que les tiene preparado. Todos bailan y toman pulque, contentos por la faena que habían hecho para su amo.

Pero esto no fue todo, siguieron batallando con este toro y empezaron a uncirlo (ponerle correas) y a amansarlo para hacerlo un animal de trabajo. Al ver su buena respuesta, los hombres lo adiestraron para jalar una carreta, en la cual se transportaron las primeras piedras para fincar el edificio que ahora se tiene como capilla.

En recuerdo de aquel hecho, el desarrollo de la Fiesta del "Torito Cabresto" se conmemora con las siguientes acciones: Existe una figurita de toro, hecho de madera tallada, su tamaño es de solo 40 centímetros y el 24 de diciembre debe ser colocado en el Nacimiento de la Capilla de San Pedro.

El día 25 del mismo mes, se ponen tres banderas blancas en lo alto de la capilla, significando que el toro se ha escapado y que hay que organizar partidas de gente para salir en su busca. El siguiente 6 de enero, los caporales salen a llanos y montes a buscar el toro, que logran encontrar el martes anterior al miércoles de ceniza.

Una vez encontrado se desborda el gusto y la alegría, hay que salir a las calles de la población a mostrar al público que se trae al bravo animal custodiado por mucha gente de a pie y de a caballo, los atuendos de los jinetes son muy pintorescos, lucen descomunales bigotes, visten chaparreras y chamarras de cuero, enormes sombreros de palma, espuelas, pañuelos rojos al cuello y soga en mano lista para lazar el toro en caso de que quiera huir.

Los lugares que solía visitar el “Torito Cabresto" en los años 90 y que en su mayoría aún recorre, son los siguientes:

El Curato

El Colegio "José María Vela"

Escuela de Niñas "General Paulino Navarro" 

Escuela de Niños "General Paulino Navarro"

Presidencia Municipal

Sr. Otilio Martínez Ruiz

Sr. Salvador Raygoza López 

Sr. Alberto Ortega Sánchez

Sr. Silvestre Acosta Acevedo

Sr. Manuel Flores Solís

Sra. Ana María López Rivadeneyra

Finalmente, la Placita del Barrio de San Pedro.

Si alguien desea que el contingente le visite en su casa, basta con que sea colocado un lienzo rojo en la puerta nombrándose a este lugar como "aguaje o abrevadero", lugar donde se hace alto y antes de pasar hay que pedir se muestre la factura del toro, en fin, todas las formalidades de la ley, a su vez le son obsequiados platos de pinole adornados con banderitas de colores, significando con esto que el toro comparte sus alimentos, que es la sal o "cristalillo" representado por el pinole. Una vez cumplidos estos requisitos, se pasa a darle agua al toro y a los sedientos caporales, agua que puede ser tequila y otra bebida.

Anteriormente, un mes antes de salir los caporales, se enviaban invitaciones a Atotonilco, Achimec y Nestores de este Municipio para darles a saber el recorrido que haría el "Torito Cabresto" y a la vez los caporales cargaban su agua y morrales con pinole, para alimentarse en caso que no les proporcionaran comida.

Terminado el recorrido, finalmente se llega a la plaza del barrio en las primeras horas de la tarde donde se encuentra el "Amo" que en este caso sería el hacendado acompañado de su esposa, un caporal mayor, un administrador y un secretario, sentados a la mesa de honor. Son presentados por el secretario; se comienza con el recuento de los daños ocasionados por el Toro a su paso. Luego son presentados los caporales quienes uno a uno tiene que torear al Torito y el último mencionado tiene que darle una Jineteada.

Posteriormente se le llama a cada uno de ellos a aclarar cuentas con el Amo, para saber cuánto le deben y en caso contrario cuánto les debe el "Amito"; se hace en forma simbólica la entrega de dinero y a la vez el "Amito", les da su pedazo de queso y pan para su capirotada.

Ya que fueron arregladas estas cosas, inmediatamente el "Amo" ordena que sean bajadas las banderas de lo alto de la Capilla, pues la búsqueda del toro ha terminado y también como símbolo de convivencia entre hacendados y personas que ayudaron en la captura del toro. Para dar término a este suceso, se hace la elección del nuevo "Amo" para el año siguiente.

Significado de "CABRESTO": Buey manso con cencerro, (campanilla que se les cuelga al pescuezo de las reses o toros) que guía a los demás.

Fuentes consultadas para la elaboración de este trabajo:

- Lorenzo Otilio Martínez Ruiz

- Raymundo Quiñonez García

- Algunos párrafos son tomados literalmente del libro HUEJUCAR, JAL. 1562-1990, de su autor Daniel Aguilar Ávila.

- Página en facebook del Torito Cabresto

- Foto del Gobierno Municipal de Huejucar

sábado, 18 de febrero de 2023

Antonio García Rivera, autor del pergamino histórico que habla de Colotlán en el siglo XIX

Por: José Alonso Serrano Campos

Existe un antiguo documento con gran valor histórico para los colotlenses que fue difundido por el gran escritor Jean Meyer, titulado “Colotlán, ex-octavo cantón de Jalisco”, en sus primeras líneas dice que Antonio Villalobos, del Departamento de Economía del Estado de Jalisco, supo en Colotlán de la existencia de este, que trata sobre la historia antigua del lugar, cuyo dueño, Julián Sánchez Ortega, colotlense radicado en Guadalajara (+), guarda en un banco y generosamente accedió a proporcionar copias fotostáticas; cuya paleografía, nada fácil por la escritura desteñida y en partes casi totalmente perdida, emprendieron varias personas de buena voluntad.

El documento, presentado como suyo, es original de José Antonio García, colotlense que de su puño escribió, letra por letra, como de imprenta, en una sola hoja de papel especial que mide ciento dos por ochenta centímetros. 

Se cuenta que, en 1928, por órdenes del presidente municipal Agustín Rivera, se desarmaron algunas tumbas del atrio de San Nicolas Tolentino. El motivo de tal acción era aprovechar la hermosa cantera labrada para usarla en el nuevo edificio de la presidencia municipal que por esas fechas se realizaba. 

Hoy sólo quedan dos tumbas que son evidencia del arte en cantera y la sensibilidad artística local de la época. En su momento no se advirtió que dicha destrucción atentaba contra el patrimonio arquitectónico, sin embargo, por suerte un hallazgo en el interior de una de ellas dejó como legado interesante el pergamino del que hoy se tiene conocimiento y aquí se cuenta parte de su historia.

El documento de gran valor histórico era original y quizá estaba como ofrenda en la tumba del presbítero Basilio Terán Martínez, hoy se desconoce el punto exacto donde fue depositado el cuerpo del sacerdote, solo se tiene como referencia en el registro de defunciones que fue colocado en el templo de San Nicolás, pero el autor del pergamino fue depositado en otro sitio años después que el padre Terán, por lo que bien pudo solo depositarlo como ofrenda a él o a alguien más enterrado en el mismo sitio.

Una versión señala que en 1942 fue copiado el pergamino por los profesores Francisco Huízar Robles, J. Gertrudis Ramos Estrada, Adrián Huízar Curiel y Carlos Bustos Álvarez; empieza a ser difundido, al principio entre una selecta parte de la población, hoy es casi de dominio público. De hecho, los estudios recientes tienen a este documento como una fuente de notable valor histórico. Una versión más señala que el documento original está en poder de la familia del Sr. Julián Sánchez, que fue obsequiado a don Julián en esta su tierra natal hacia 1950, por su maestra de primaria, la señorita M. Guadalupe Díaz Rodríguez. Lo mejor de tal hallazgo es que hoy conocemos el contenido del mismo.

El autor, quien se le ha considerado como el segundo cronista de Colotlán, después de Fray Francisco Frejes, dejó en su texto diversos datos que incluyen una cronología del siglo XIX con interesantes datos que vinieron a enriquecer el conocimiento histórico de nuestra ciudad, los datos abarcan un período de 1801 hasta 1899. Menciona antes del prólogo, tener como fuente un documento del citado fraile, que es a su vez cronista del Colegio de Guadalupe, Zacatecas; trataremos de indagar sobre ese texto particular en posteriores escritos.

Meyer comenta en su intervención que no se tenían noticias precisas del autor, pero hoy se pueden contar con peculiar exactitud, gracias a los registros consultados tanto de la iglesia como del Registro Civil de Colotlán, se identifica a dicho autor como José Tomás Antonio García Rivera, su nombre completo consta en la fe de bautizo del 22 de diciembre de 1836 en la parroquia de Colotlán:

“En la iglesia parroquial de Colotlán a veintidós de diciembre de mil ochocientos treinta y seis, el señor cura Don José Tadeo Suarez, bautizó solemnemente a un niño de dos días nacido en esta ciudad, a quien se puso por nombre José Tomás Antonio, hijo legítimo de Rosalío García y Francisca Rivera, A. P. (abuelos paternos) Manuel Cayetano García y Mari Manuela Torres A. M. (abuelos maternos) Juan José Rivera y Tomasa Márquez. Fueron padrinos D. Rafael Rodríguez y Da. Aniceta de Casas, a quienes advirtió su obligación y parentesco espiritual. Y para que conste lo firmo como Párroco.  José Tadeo Suarez”

Aún falta encontrar en los archivos parroquiales su registro matrimonial, pero por las actas de defunción de él y de su esposa consultadas en el Registro Civil de las partidas de defunción de Colotlán, se saben mas detalles de él y son los siguientes: 


El 24 de julio de 1888 cuando murió su esposa Luisa Ramírez Portillo, se señala en el acta que fue filarmónico, ella era hija de los señores Rafael Ramírez y Mónica Portillo; él mismo compareció y dijo "que ayer a las 12 de la noche en esta misma ciudad, falleció su esposa a los 34 años de edad, de inflamación de intestinos", sus restos fueron depositados en el Cementerio de la Cruz, donde hoy es la Secundaria Foránea.

Luego, al morir Don Antonio García a la edad de 88 años de marasmo senil y sin asistencia médica, a las tres de la tarde del día cinco de julio de 1902, siendo viudo, fue registrado como Pintor de Colotlán, hijo de Rosalio García y de la señora Francisca Rivera, en el registro se agrega algo lamentable para tan importante artista: "inhumado gratuitamente en fosa común en el panteón de Guadalupe de este lugar, en virtud de haber sido probada la insolvencia del interesado”.


Antonio García Rivera, que, por lo visto, dedicó al texto consignado en esa hoja la misma atención y paciencia que a un cuadro, había ensayado su redacción en forma un tanto distinta, a juzgar por varias citas hechas por el investigador totatichense Alfredo Vázquez de Mercado antes de 1974.

El documento íntegro aquí citado lo compartiremos en una próxima entrega.


Colotlán, Zacatecas fue nombrado así durante siete meses en 1867

Mapa de los Cantones de Jalisco 1857
Por: José Alonso Serrano Campos

En pleno siglo XIX, año de 1867, Colotlán y su Octavo Cantón de Jalisco perteneció al estado de Zacatecas, por designación federal, sumido a intensos enfrentamientos bélicos con el Imperio de Maximiliano; luego de algunos meses, encontraron la estabilidad y el decreto se derogó para volver a ser territorio jalisciense; a continuación, los detalles de esta afirmación histórica hasta hoy desconocida.

En contexto, los acontecimientos que dieron lugar a este hecho histórico son los siguientes: El 4 de octubre de 1824 se promulgó el Acta Constitutiva de la Federación donde se establecía que los estados federados podían emitir sus propias constituciones y redefinirían su organización territorial interna, Jalisco hizo lo propio con la desingación de Cantones, Colotlán fue el Octavo.

La Constitución local de Jalisco se promulgó en noviembre de 1824 y simultáneo a ello los departamento se agruparon en cantones, situación que perduró hasta 1915; primero fueron ocho cantones: 1º Cantón de Guadalajara, 2º Cantón de Lagos, 3º Cantón La Barca, 4º Cantón de Sayula, 5º Cantón de Etzatlán, 6º Cantón de Autlán, 7º Cantón de Tepic (que desde 1859 iniciaría un proceso que a la postre lo llevaría a convertirse en territorio de la federación y luego en el estado de Nayarit) y 8º Cantón de Colotlán. Con posterioridad se creó el 9º Cantón de Ciudad Guzmán (1856), el 10º Cantón de Mascota (1870), 11º Cantón de Teocaltiche (1870), 12º Cantón de Ahualulco y Tequila (1872), finalmente Chapala es nombrado 7º Cantón (1896) en lugar del de Tepic. Los Cantones de dividían en Departamentos y estos últimos en Municipalidades.

Maximiliano de Habsburgo fue Emperador de México entre 1863 y 1867, su reinado fue el único del Segundo Imperio Mexicano que se ha tenido, paralelo al gobierno encabezado por Benito Juárez. Con la suspensión de pagos de la deuda externa, Francia (aliada de España y Reino Unido) inició en 1861 una intervención en México por no poder pagar sus deudas con Europa, debido al precario erario público consecuencia de la guerra de reforma, el puerto de Veracruz fue invadido el 15 de diciembre de 1861. Aunque sus aliados se retiraron de la batalla en abril de 1862 el ejército francés permaneció en el país.

Maximiliano de Habsburgo

En 1865, con el fin de la Guerra de Secesión, Estados Unidos patrocinó a las fuerzas republicanas que, junto a la retirada del ejército francés al año siguiente, debilitó aún más la situación de Maximiliano. Derrotado en el Cerro de las Campanas en la ciudad de Querétaro, Maximiliano fue capturado, juzgado por una corte marcial y mandado fusilar el 19 de junio de 1867. Tras su muerte se reinstauró el sistema republicano en México, que dio inicio al periodo denominado como la República Restaurada.

Regresando un poco en las fechas, en febrero de 1863, quedó registrado en el documento histórico del señor Antonio García Rivera, la entrada a Colotlán por primera vez de los franceses, agarrando al general Galarde y mucha tropa del general Fernández. Éste huyó, pero fue muerto por el Juez de Acordada de la Agua Gorda en el rancho de Cuisco.

Al frente de la parroquia de San Luis de Colotlán estaba el Señor Cura Basilio Terán Martínez, quien a partir de 1864, cuando se erigió la Diócesis de Zacatecas, el padre Terán incorporó a Colotlán a la nueva Diócesis, separándose de la Arquidiócesis de Guadalajara, situación que prevalece hasta nuestros días.

Mientras tanto, el 18 de diciembre de 1866 se escenificó en la hacienda de La Coronilla, cerca de Santa Ana Acatlán, un fuerte combate entre tropas francesas y las fuerzas comandadas por el general Eulogio Parra, quien conquistó la victoria cubriendo de gloria las armas mexicanas. Otro de los hombres que logró grandes triunfos para México en esta guerra, fue el General Ramón Corona.

El 21 de diciembre el general Parra entró triunfante a la ciudad de Guadalajara y unos días después, el 14 de enero de 1867, arriba a la capital tapatía, el general Ramón Corona, con este hecho se da por restaurado el orden constitucional en el estado, aplicando los preceptos de la Carta Magna de 1857 y las Leyes de Reforma.

Benito Juarez

El 1 de febrero del mismo año Liberales ganan la Batalla de San Jacinto. Por este triunfo, Juárez obtiene reconocimiento nacional e internacional, las tropas francesas habían desocupado los estados de Jalisco, Zacatecas, San Luis Potosí, Guanajuato y parte de Hidalgo. Benito Juárez, para estimular a los combatientes, se acercó lo más posible a la vanguardia, al efecto había salido de Durango y el 22 de enero, instalado su gobierno en Zacatecas.

Joseph Antonio Gómez Cuervo

Por su parte, el 15 de febrero se promulgó en Jalisco y entró en vigor al día siguiente un decreto del gobernador interino de ese momento, Antonio Gómez Cuervo, quien, por disposición federal para continuar con la estrategia de la guerra, publicó que Colotlán fuera separado de Jalisco y se incorporara a Zacatecas. La disposición se revocó el 10 de septiembre de ese mismo año, con la argumentación de que la separación se debió a “exigencias de orden militar”.

De febrero a septiembre, por disposición del presidente de la República, según aparece en la declaratoria de la época donde necesitaba el Presidente Juarez fortalecer las defensas en torno a la capital zacatecana, el 8º Cantón fue separado de Jalisco y agregado al estado de Zacatecas, por mera estrategia militar, recordemos que se vivían dos gobiernos, uno liberal y otro imperial de forma paralela; luego del triunfo liberal se logró la separación del territorio de Colotlán del Estado de Zacatecas, una extensión como actualmente la conocemos que abarca desde Bolaños hasta Colotlán, de diversos pueblos anexados durante la guerra, pero que regresó a ser parte de Jalisco como lo refiere “La Unión Liberal” de Guadalajara en su publicación del 9 de septiembre de 1867 en su tomo I, núm. 4, páginas 1 y 2. 

Quizá mucha de la población colotlense en esa época ni cuenta se dio del cambio político que representó pertenecer al Estado de Zacatecas durante poco más de siete meses, en el decreto del Poder Legislativo y Ejecutivo del Estado de Jalisco del 10 de septiembre se lee la reivindicación de la siguiente manera:

Secretaría del Gobierno y comandancia militar del Estado de Jalisco. -Sección de gobernación. – Circular núm. 34. – Con fecha 4 del corriente, el ciudadano ministro de relaciones exteriores y gobernación, dirige al Gobierno del Estado la comunicación siguiente:

“Atendiendo a lo expuesto por vd. En su oficio de 27 de Agosto último, sobre que la resolución suprema de 16 de febrero de este año, relativa a que el cantón de Colotlán de este Estado de Jalisco continuase por entonces agregado al de Zacatecas, se fundó especialmente en la necesidad de atender a las exigencias del orden militar en las circunstancias que guardaba la guerra; y sobre que ahora es necesario que ya se reincorpore al estado de Jalisco, con motivo de que va a procederse a las elecciones de los poderes generales y a las particulares del estado: se ha servido resolver el ciudadano Presidente de la República que cesan los efectos de dicha resolución de 16 de febrero de este año, y que en consecuencia, el cantón de Colotlán se reincorpore a ese Estado de Jalisco a que pertenece. – Transcribo esta resolución al ciudadano Gobernador del Estado de Zacatecas para su conocimiento y fines consiguientes.”

Y por disposición superior lo transcribo a vd. Para su inteligencia, advirtiéndole a la vez que para los efectos electorales, Bolaños y Colotlán permanecerán el 18º distrito, siendo su cabecera el último punto.

Independencia y libertad. Guadalajara, Septiembre 10 de 1867. – A. Lancoster Jones, secretario – Ciudadano jefe político del cantón de … _



En ese mismo período a la provincia de Zacatecas se había incorporado Juchipila, Aguascalientes y Colotlán. Juárez requería en Zacatecas fortalecer sus defensas, se reinstalaron las intendencias, pero con cambios sustanciales en cuanto a la intendencia correspondiente a Guadalajara: se había agregado el territorio de Colotlán con Bolaños como uno de sus partidos, se ordenó su traslado a la jurisdicción zacatecana: “que en algún momento fue considerado territorio sujeto directamente al ejecutivo nacional; pero una disposición del 10 de septiembre del mismo año reintegró la región a Jalisco, pues había terminado la guerra”, esta cita pertenece a la Enciclopedia Temática de Jalisco de 1992.

A partir de 1867, con la restauración de la República, se inicia para México un difícil y problemático recorrido que buscaba restablecer las instituciones republicanas y fomentar las libertades políticas, el 14 de agosto, al convocarse a elecciones, se inició la definición de posición de quienes participaban en grupos políticos. En Jalisco, la contienda se dio entre los grupos de liberales moderados y liberales “puros”, es decir, radicales en sus ideas, claramente era de su interés que todo el cantón de Colotlán participara con sus votos en dicha contienda. Apareció en la escena política, como un elemento de peso en este renglón, la Unión Liberal bajo el auspicio de Ignacio L. Vallarta. Integraban este grupo, miembros de la intelectualidad jalisciense puros. Otro grupo liberal radical que cobró fuerza fue el Club Republicano Progresista, alcanzando presencia de estos grupos políticos en nuestra región.

Fue hasta 1914, año en que se eliminan los cantones y departamentos que se dio lugar a la división municipal, Colotlán fungió como centro rector del cantón número ocho, estaban en su departamento los siguientes distritos con sus principales pueblos: Colotlán, Santiago; Santa María; Huejúcar, Tlalcosagua; Mezquitic, Nostic; Huejuquilla el Alto, San Nicolás, Soledad, Tenzompa; San Andrés del Teúl y Nueva Tlaxcala (perdidos en 1856); Real de Bolaños, San Sebastián, Santa Catarina, San Andrés Coamiata, Huilacatitán; Totatiche, Temastián, Asqueltán, Acaspulco; Chimaltitán, Cocoasco; San Martín, Mamatla, Tepizuac y Pochotitán.


Gobernador de Jalisco don Joseph Antonio Gómez Cuervo

El 21 de enero de 1820 en el Santuario de Guadalupe de la Ciudad de Guadalajara una criatura recibía el agua bendita y con ella el nombre de Joseph Antonio, el varoncito de acuerdo con el acta al calce, había nacido el 17 del mismo mes y mismo año. Sus padres fueron Santos Gómez y Diana Cuervo.

El niño creció y llegó a gobernador del estado de Jalisco. Durante su gestión como jefe del ejecutivo fue que Colotlán dejó de ser por siete meses de Jalisco, después de haber estado al frente del Estado Libre y Soberano, Don Joseph Antonio se mudó de Guadalajara a Tequila pues los negocios de la familia Cuervo, así lo exigían.

En el pueblo que le dio el nombre al ahora internacional aguardiente de agave don Joseph Antonio Gómez Cuervo, falleció el primero de agosto de 1884 según consta el acta de defunción. La causa del deceso según el mismo documento oficial dice que fueron “fríos reincidentes”.




lunes, 6 de febrero de 2023

Mtra. Eva Verónica Quintanilla Álvarez, gran historiadora de Colotlán


Colotlense con orgullo por su tierra. Es profesora de Educación Primaria egresada de la Escuela Normal Experimental de Colotlán. Con Licenciatura en Educación Básica en UPN y Licenciatura en Español en la Escuela Normal Superior de Jalisco. 

Cuenta con Maestría en Educación en MEIPE. Ha laborado en niveles de Educación Básica y Media Superior frente a grupo como en tareas administrativas. Participó en el Círculo de Investigaciones Históricas de Colotlán. Es coautora del libro "La Riqueza Oral de Colotlán".

Participa y promueve actividades que lleven al mejoramiento y difusión de la cultura. Se preocupa por desarrollar eventos de investigación histórica, destacando las tradiciones y la oralidad, entre 1994 y 1995 como docente del Colegio "Jalisco" fue de gran inspiración para que el autor de este blog siguiera sus pasos de investigación.

Antología de escritos de la maestra Vero Quintanilla:

DE PITA Y DE CHILE

Nuestra tierra no se explica sin talabarterías ni cenadurías. Las talabarterías, aún las más modestas, hilan con pita la historia de cada día. Sus diseños desde conservadores hasta novedosos difunden, literalmente, la forma de ser de sus habitantes. Algunos famosos completan su ajuar con un artículo bordado en pita, un charro no está completo si no lleva puesto al menos un cinto piteado, el resto de los mortales podemos usar eventualmente un artículo bordado, eso sí, con mucho orgullo.


DE TRES A QUINCE BARRIOS

Fue el 21 de agosto de 1591 cuando se fundó Colotlán como villa española, en ese momento se delimitaron tres barrios en los que sus habitantes se agrupaban según el origen: Tlaxcala, Soyatitlán y Tochopa. En primero de estos ocupó el área más céntrica que ahora se identifica también como centro y se extiende por vanas manzanas en torno a las construcciones más antiguas. Las dos restantes se reconocen de entre las más antiguas, aunque la última pareciera de reciente creación. Colotlán ha sido históricamente un punto de encuentro regional y su aumento progresivo ha modificado su imagen urbana.

Actualmente se identifican doce barrios que se suman a los antes mencionados: Los más antiguos son Barrio Alto, del Rincón Verde, de la Piedra China, de Chihuahua, Acaponeta y Canoas; los más recientes son Lomas de la Cruz, Las Golondrinas, Colinas de la Normal, Nueva Tlaxcala, Canoas de Arriba y La Cantera. El inevitable crecimiento irá modificando el aspecto físico de nuestra ciudad y seguramente se crearán nuevos barrios o colonias, mientras tanto, los que habitamos hoy este lugar aún podemos hacer traslados a pie sin que nos implique demasiado esfuerzo.


EL BARRIO DE TOCHOPA Y SU UNIDAD DE MANEJO AMBIENTAL (UMA)

El barrio de Tochopa cuenta con una Unidad de Manejo Ambiental que resulta de particular atractivo para la población infantil. Es un parque que abriga a 13 especies de animales algunas de las cuales están en peligro de extinción. Con un horario de 9:00 a 20:00 horas de martes a domingo ofrece también el servicio de visitas guiadas para grupos escolares. Desarrolla actividades didácticas de educación ambiental que buscan contribuir en la conciencia ecológica de quienes lo visitan.


LA IMPORTACIA HISTORIA DE COLOTIAN ES INEGABLE

Nuestra ciudad como asentamiento humano y cuyo nombre la cambiado a través del tiempo, ha conservado la importancia regional que le distingue hasta nuestros días. Esta afirmación se doca. menta en distintas fuentes y la coincidencia permite aseverar que su ubicación geográfica y sus circunstancias históricas han sido privilegiadas. Es un punto de encuentro. A lo largo de la historia se ha constituido una identidad que añade a su territorio y población una fisonomía única.

Colotlán fue en su momento puerta de entrada y filtro de la cultura mesoamericana y europea, con el paso del tiempo lo fue para la integración de otras formas de progreso, hoy sigue siéndolo para la modernización con todo lo que ella implica.

Según los documentos históricos que acreditan su importancia, sus denominaciones han sido diversas: Frontera, presidio, colonia indígena agrícola, villa, pueblo-presidio, gobierno, ciudad, cantón y más recientemente cabecera de región, además de ciudad conforme al nuevo concepto. Ya sea que se le reconozca o no, sigue teniendo innegable importancia regional.


LA LÁMINA 70 DEL LIENZO DE TLAXCALA

Sobre el origen de Colotlán en su versión prehispánica hay escasa información, la existente hace referencia imprecisa sobre la localidad y más bien alude a flujos migratorios en la vasta región conocida como frontera chichimeca. Se sabe que quizá debido a lo accidentado del terreno la conquista tardó en consumarse; hay quienes afirman que nunca ocurrió ésta en sentidos estricto. La reconstrucción que se hace

hoy a partir de documentos históricos es sin duda interesante. La lámina 7O del Lienzo de Tlaxcala es uno de esos pocos documentos que describen a Colotlán en su origen; En ella se representa el momento de la llegada de los colonizadores y es una de las evidencias más contundentes acerca de la importancia regional de este asentamiento humano.

Al observar las imágenes del lienzo se puede ver una clara referencia al carácter bélico de la población local y el choque des. igual de fuerzas. En la parte superior derecha, además del nombre explícito de Colotlán, aparece la figura del alacrán como emblema ancestral que nos identifica desde el punto de vista de la toponimia. Sobra decir que la ubicación geográfica de nuestra ciudad ha sido privilegiada en el contexto regional; esta circunstancia se puede apreciar hasta nuestros días.


JOSÉ REFUGIO RAYGOZA PACHECO, COLOTLENSE DISTINGUIDO

Colotlense distinguido por su calidad humana y moral, agregó a sus cualidades naturales la de amante de la lectura, la música clásica y la escritura. La primera de éstas le permitió compartir no sólo de una buena conversación sino tener una visión del mundo muy avanzada y promover en sus gestiones proyectos sociales de gran acierto. Los textos que escribió, aunque poco divulgados, poseen especial refinamiento literario. Su genuina preocupación por el pueblo le hizo conquistar en tres ocasiones la presidencia municipal; durante los primeros gestionó y desarrolló importantes obras de servicio público. Fue un líder político natural. Cauto en sus intervenciones públicas, supo hacer del poder un ejercicio social auténtico y reconocido. Respetable no sólo en la esfera política, se le reconoce como un servidor público de gran estima. Es, por mucho, el mejor presidente municipal en la historia reciente.


JOSE REFUGIO RAYGOZA PACHECO, UN EXPRESIDENTE CON VISIÓN DE FUTURO

Nacido en El Carrizal, municipio de Colotlán llega a nuestra ciudad a la edad de siete años donde empieza a estudiar la primaria en la escuela para niños ubicada en el espacio que hoy ocupa el mercado municipal. Más tarde estudia comercio con la señora Cuca Cortés. Al cumplir diecisiete años fallece su padre lo que le obliga a asumir a temprana edad la responsabilidad de tutor de la familia.

Su nuevo rol le hace madurar ganándose con ello el respeto y admiración de todos los que le conocieron y de la cual disfrutó hasta sus últimos días. El mejor presidente municipal en la historia reciente.


OBRA PÚBLICA DE DON JOSÉ REFUGIO RAYGOZA PACHECO

Sus gestiones municipales también tuvieron algunos sobresaltos. Enfrentó manifestaciones de inconformidad de la población por la introducción de algunos servicios públicos como el agua potable y el drenaje. Dato curioso es que las mismas personas, entre ellas buen número de mujeres, que al principio encabezaron y promovieron las citadas resistencias, posteriormente ofrecieron disculpas y agradecieron expresamente que hubiera desarrollado tales obras.

Fue amigo personal de Francisco García, gobernador de Zacatecas quien le prestó una perforadora para abrir el primer pozo artesano del municipio. El mismo, en 1957, gestionó para la obtención de maíz con que abasteció la demanda local en ese año que se registró escasez.

Lo más destacado en su período fue: Gestionó la compra de 7 a 8 toneladas de maíz por crisis agrícola (1957), Promotor y fundador de la Escuela Secundaria por Cooperación (1958), Gestión para la construcción de la Presa de la Boquilla de los Pérez (1959), Perforación del primer pozo para agua potable en la alameda (1959), Introducción de agua potable a la población (1960), Inauguró el funcionamiento del Centro de Salud (1960), Introducción de la energía eléctrica continua (1961), Construcción del primer rastro municipal (1961), Introducción del drenaje (1966), Realizó la primer feria regional (1967), Promovió la fundación de la Escuela Normal (1975), Reconstrucción y modernización del edificio de la presidencia municipal (1976) entre otras. De igual forma asesoró a administraciones municipales posteriores que reconocieron en él cualidades para la administración pública.


RICARDO URISTA ALVARADO, UN ARTISTA COMPLETO

Ricardo Urista Alvarado es un colotlense que ha logrado consolidar una notable trayectoria como pintor, no obstante, tiene más cualidades, aunque sean menos conocidas; es escultor, músico y escritor. Desde temprana edad mostró sus dotes como dibujante; la dedica. con a ello, su constante preparación y la búsqueda de nuevas técnicas han hecho de él un destacado artista en ese arte, sin descuidar los otros. Maneja diversas técnicas, ha creado su propio estilo y siempre está innovando. Su contacto con reconocidos maestros del arte y críticos del mismo le ha permitido adquirir una madurez que es evidente. Ha expuesto en diversos lugares dentro y fuera del país, en nuestra ciudad contamos con un gran mural en las escalinatas del Palacio Municipal.

El texto Yo Colotlán que acompaña al citado mural, es una muestra clara de sus cualidades como escritor; otros textos de notable interés fueron los que acompañaron a su colección de pintura Icaro, vuelos cotidianos. Además de escribir relatos y cuentos ha investigado sobre facetas desconocidas de Victoriano Huerta y está por publicar al respecto. Toca música clásica y sus esculturas son de gran valor artístico. Él es, hoy por hoy, uno de los colotlenses más distinguidos por sus cualidades artísticas.


DON SIMÓN NAVARRO ALEJO. CAMPEÓN NACIONAL DE UNA DE LAS SUERTES DE LA CHARRERÍA

El deporte de la charrería ha gozado de prestigio por varias décadas en Colotlán y la región; uno de los principales promotores e impulsores de esta actividad ha sido Don Simón Navarro Alejo.

Él practicó dicho deporte durante sesenta años y se especializó en las colas, suerte de la cual fue campeón nacional; de igual forma estimuló la conformación de asociaciones y la participación en congresos nacionales. Hay una anécdota que relata como en Aguascalientes, habiendo hecho un excelente papel en el congreso nacional y luego de obtener el primer lugar, cedieron el triunfo a un equipo del Estado de México.

A sus noventa y tres años de edad Don Simón sigue disfrutando de la fiesta charra, sólo que ahora lo hace como espectador. El ya hizo su parte y toca a las nuevas generaciones seguir ofreciendo espectáculos de calidad como lo hiciera alguna vez él y su equipo de los cuales se cuentan numerosas anécdotas.


EDUCACIÓN SOCIALISTA EN COLOTLÁN

Lucía o Luz Curiel, hizo honor a su nombre cuando llegó a reabrir la escuela primaria en Las Canoas, en 1936. Con su desempeño ofreció no sólo la posibilidad del acceso al conocimiento científico, también desarrolló notable actividad extraescolar que le valió el reconocimiento social. Esto también sería su sentencia de muerte.

En el Colotlán conservador de la década de los 30's. donde intereses caciquiles de múltiples facetas, determinaban en lo político y social, no tenía cabida nada que contrarrestara la ignorancia, mucho menos si lo promovía una mujer. Todo lo que aquélla dijera sería tomado como provocación. Su violento asesinato no fue sino la consumación de una muerte anunciada. La pregunta obligada seguiría siendo ¿Qué clase de intereses se coludieron para mantener el "orden" que imperaba? La respuesta podría ser aberrante.


LA PRIMERA ACADEMIA COMERCIAL.

Era finales de los años cuarenta cuando se abrió la academia “Juana de Arco". Esta se ofrecía como un servicio parroquial a jóvenes, hombres y mujeres, que desearan desarrollar alguna habilidad para incorporarse luego al trabajo productivo. Funcionaba en el salón de San Nicolás y la instrucción estaba a cargo de la señorita Cuca Cortés. Las enseñanzas eran básicamente de mecanografía y archivonomía. Era para muchos, la única posibilidad de seguirse escolarizando después de concluir la primaria ya que no había entonces el servicio de secundaria. A decir de los egresados de dicha academia, la responsabilidad y disciplina adquiridos en ella era garantía de éxito no sólo en el plano laboral sino sobre todo en el personal.


LA ACADEMIA COMERCIAL PITMAN Y SU LEGADO

La Academia Comercial Pitman que durante 48 años dirigió la señorita Ma. Auxilio Martínez Aguilar, ofreció a la población la posibilidad de formarse y obtener el título de Secretario Empresarial. El prestigio de dicha institución que tuvo abiertas sus puertas de 1952 al 2000, también se extendió a otros municipios vecinos. Al egresar sus estudiantes, en su mayoría mujeres, no sólo tenían conocimientos básicos respectivos, también obtenían la posibilidad de conseguir en corto tiempo un buen empleo. La formación integral incluía mecanografía, taquigrafía, caligrafía, ortografía, correspondencia, documentación, archivonomía y a partir de 1969 la materia de contabilidad. Por otra parte, era elemental adquirir bases sobre relaciones humanas y urbanidad en la oficina. Para muchos jóvenes esta academia representó el principio firme de una carrera profesional y la integración exitosa al mercado laboral.


DETALLES DE LA ACADEMIA COMERCIAL PITMAN

Inició labores en 1952 y egresó la última generación en el año 2000. La población escolar era en su mayoría mujeres, las había solteras y casadas. A partir de 1969 se agregó la materia de contabilidad con lo cual se mejoró los conocimientos y al egreso se obtenía el título de Secretaria Empresarial. El prestigio de esta institución traspaso las fronteras geográficas y atendió población de otros municipios distantes. La generación más numerosa fue de cuarenta alumnas en el ciclo escolar 1981-1983.

Por varios años hizo presencia en eventos cívicos, sociales, religiosos y políticos tales como desfiles y ceremonias. Cada día, antes de iniciar labores, se santiguaban y rezaban a coro el poema Hazme un instrumento de tu paz. La ceremonia de fin de cursos era realizada con mucho protocolo y presidida por autoridades educativas; sólo las primeras generaciones hicieron el examen final en la ciudad de Zacatecas donde tenía las oficinas centrales la institución que respaldó con el reconocimiento de estudios.


NOPAL CUARESMEÑO: TAN ESPINOSO COMO SABROSO

La cuaresma empieza y con ella también la recolección de nopal, uno más de los frutos de la flora silvestre local que hacen de nuestra tradición culinaria algo exquisito y especial. Entre más tierno mejor dicen las cocineras y por supuesto los comensales lo ratifican. Pero hay que decirlo, para los recolectores no es tarea sencilla ya que, a diferencia del nopal cultivado, éste es de abundante espina.

La búsqueda ha de ser muy temprano de preferencia. Se cortan, limpian en seco, lavan para quitar resto de espinas, cortan o pican en tiras finas para su venta y se ofrecen en el mercado o de puerta en puerta. Los más pequeños se venden enteros y en los mejores días de cosecha hasta los de mayor tamaño son tiernos por lo que el consumidor los prefiere sin picar.

Si crudos son deliciosos ya cocidos se multiplican las formas de consumo: Ensaladas, curtidos, guisados con mole al gusto, asado, pipián, entre otros; al natural son recomendables en licuados dieté-ticos. Asados también son muy gustados. De marzo a junio se puede disfrutar de este producto natural cortado del día, el resto del año se consume en forma de conserva lo cual no mengua su sabor. Las propiedades digestivas aportan un valor agregado a este delicioso recurso natural.

Es este nopal en las variedades conocidas como duraznillo y chaveño productos naturales que dan identidad a la cocina colotlense, particularmente asociado a la tradición cuaresmal por aquello de la abstinencia. Hay entre la biodiversidad local más variedad de nopal no menos sabrosa: Chamacuero, zarquito y tapón, especies menos favorecidas por los paladares exigentes.


NUESTRO ORÉGANO, UN REGALO DE LOS DIOSES

El orégano que se recolecta en los alrededores de este lugar no es una planta cualquiera, es un regalo de dioses. Un producto natural único y con tan variados usos es, sin lugar a dudas, privilegio del que nos podemos jactar. Los usos domésticos van desde los de orden culinario hasta de carácter medicinal, mezclado en alimentos además de dar un sabor inigualable, aromatizan y sazona de tal forma que convierte cualquier platillo en un manjar. La variada cocina local no se explica sin éste como ingrediente básico, las recetas tradicionales que lo incluyen son nuestro orgullo gastronómico: Chorizo, curtidos, adobos, salsas, birria, ensaladas entre otros.

Mención aparte es la propiedad curativa que la tradición oral le asigna, en infusión "cura y bien" a decir de las abuelas. Se le atribuyen eficaces propiedades digestivas y medicinales que lo convierten en producto básico de la cocina colotlense. Su recolección es relativamente sencilla y accesible ya que forma parte de la biodiversidad local. Los meses de septiembre, octubre y a veces hasta noviembre, son ideales para buscarlo fresco en los alrededores sin tener que ir lejos. Por lo que toca al proceso de secado y conservación es también sencilla. Se extienden las ramas al sol para deshidratarlo, se deshoja y ya está listo para guardar o usar. Una pizca de orégano en mucho de los platillos tradiciones hace la gran diferencia que aprecia el paladar más exigente.


MUCHAS CENADURÍAS, UNA SOLA TRADICIÓN

Una invitación a cenar suele ser irresistible cuando se trata de hacerlo en Colotlán. La cantidad de cenadurías es tanta como sazones, todas han dado a últimas fechas popularidad a la gastronomía local. Parece que hubiera una especie de embrujo nocturno que lleva a gran parte de la población a visitar alguna de tantas que abren sus puertas cada noche; las hay desde las de estilo tradicional hasta aquellas que incorporan nuevas modalidades en los mismos productos: Gorditas, tacos, curtido, carne seca, flautas, tostadas, algunas ofrecen también enchiladas, sopes y algunos días el rico pozole.

No hay que ir lejos, siempre hay alguna cenaduría a un paso de la casa y todas tendrán sin duda la salsa picante con que darse una buena enchilada. Todo es delicioso recién hecho, pero al recalentar no se merma el sabor. Hay cenadurías que tienen décadas ofreciendo sus antojos mientras otras se suman a la lista y algunas más han desaparecido ¿Cómo olvidar los taquitos y las enchiladas de Chilo la de los portales o la verdura curtida de Doña Mary la de la paseo...?


LOS ANTOJOS DE CHAGUA, IRRESISTIBLES Y DELICIOSOS

Para los colotlenses, donde quiera que se encuentren, saborear los antojos de Chagua equivale a evocar los entrañables sabores de la tierra que nos vio nacer y donde pasamos los mejores momentos de la infancia, adolescencia o quizá para algunos continúe siendo esa casa que nos alberga. De entre los sabores que nos son familiares están los diversos productos que se hornean en casa de Chagua:

Pan de chiquihuite, gorditas de maíz crudo, contamales, polvorones, gorditas de cuajada, las de frijoles, quesadillas y semas. Las múltiples formas de consumir algunos de ellos como los contamales y el pan de chiquihuite, los convierten en productos de gran demanda para propios y extraños.

Chagua tiene cincuenta años haciendo los antojos que hoy nos identifican y enorgullecen. El método de elaboración sigue siendo tradicional, de allí sus sabores especiales. Uno puede llegar cualquier tarde y la encuentra horneando y es muy seguro que sin dilación le ofrezca "una calientita". Su popularidad ha traspasado fronteras pues suele entregar en grandes volúmenes para mandar fuera del país, no sólo a Estados Unidos sino a otros lugares del mundo donde haya algún colotlense.


LOS ANTOJOS DE CUARESMA

Con relación a la gastronomía colotlense, la cuaresma es un período particularmente especial; los es porque la tradición ha impuesto algunos platillos que tienen con ver con los recursos naturales del entorno inmediato además de los que dicta la costumbre por aquello del ayuno y la abstinencia. Los sabores, colores y olores de esta temporada están asociados a nuestros mejores momentos familiares; la hora de la comida. Nuestros paladares se han vuelto exigentes y por ello se mantienen ciertas costumbres alimenticias.

Guáchales, con o sin joconoistes, nopalitos en variadas presentaciones, tortitas de guáchales o polvo de camarón, papas en mole, chícharos con huevo, chiles rellenos de queso o papas, agua de verduras con fruta y desde luego la capirotada, son los platillos que nos dan identidad. La naturaleza fue generosa con nuestros campos y de allí la variedad de comidas tradicionales. Son pocos los ingredientes que no son locales y de fácil adquisición. Ojalá las generaciones futuras sepan de estas riquezas gastronómicas y las preserven.


LOS ATRACTIVOS DEL CERRO DE SAN NICOLÁS

El cerro de San Nicolás, uno de los atractivos naturales de nuestro municipio, ofrece hoy una nueva alternativa de esparcimiento, un parque ecoturístico. Hasta no hace mucho, este cerro era un lugar explorado sólo por unos cuantos aventureros que hacían campamentos en una de los puntos más distantes y exóticos. Las condiciones de acceso habían hecho de éste un área desconocida para la mayoría de colotlenses. La distancia permite imaginar de forma limitada sus condiciones, sin embargo, estar al pie del cerro es una experiencia única ya que es posible corroborar cuan rica es nuestra biodiversidad y lo impresionante de su accidentada geografía.

Dicen los que saben que el cerro de San Nicolás tiene también abundantes historias y leyendas. De lo más conocido por la tradición oral es la cueva del Meco, lugar donde se dice que fue hallada la imagen de San Nicolás y de la que surgió la leyenda popular que se cuenta entre los habitantes. Actualmente tiene además de los atractivos naturales un restaurante que ofrece comida tradicional y tirolesa. Ojalá que podamos disfrutar, pero sobre todo cuidar este espacio natural que hoy está a nuestro alcance.


COLOTLÁN Y SU ALACRÁN NOCTURNO

Nuestra tierra cuyo nombre significa lugar de alacranes, ha expandido su crecimiento de tal forma que hoy cuenta en la cabecera una población cercana a los diecisiete mil habitantes (INEGI 2005). Los últimos años ha crecido de tal forma que su distribución da lugar a un fenómeno extraordinario que puede apreciarse sólo de noche:

Las luces nocturnas forman un enorme alacrán, está tan detallado de forma que pueden notarse con claridad sus tenazas y su ponzoña. Los puntos de donde mejor se distingue dicha imagen son los cerros de Santiago y el de San Nicolás. El crecimiento urbano es inevitable por lo que es probable que el paso del tiempo deforme la forma que hoy es tan clara, no obstante, los que hoy vivimos aquí tenemos la fortuna de constatar este fenómeno que muestra en forma física un elemento que nos es tan propio.


ATRACTIVOS NATURALES DEL MUNICIPIO

La riqueza natural del municipio ofrece a propios v extraños diversos lugares que son un deleite para el espíritu. Hay para todos los gustos y hasta para los más intrépidos; hay para caminar, acampar, explorar y poner a prueba la condición física. De entre los mejores están el cerro de San Nicolás, el cerro de Santiago, la cascada de la Trinidad, el mirador Cuesta de la Novia, la Boquilla de los Pérez, el arroyo de la Cantera y algunos más que en temporada de lluvias incrementan su atractivo. Todos son accesibles y en cada uno de ellos hay flora y fauna de la que también se puede disfrutar.


DE TUMBAS Y HALLAZGOS

En 1928, por órdenes del presidente municipal don Agustín Rivera, se desarmaron algunas tumbas del atrio de San Nicolas. El motivo de tal acción era aprovechar la hermosa cantera labrada para usarla en el nuevo edificio de la presidencia municipal que por esas fechas se realizaba. Hoy sólo quedan dos tumbas que son evidencia de arte canterero local y la sensibilidad artística de la época. En su momento no se advirtió que dicha destrucción atentara contra el patrimonio arquitectónico, sin embargo, por suerte un hallazgo en el interior de una de ellas nos dejó un legado interesante; un pergamino del que hoy se tiene conocimiento.

El documento de gran valor histórico era original y fue escrito por Juan Antonio Rivera García, a decir del mismo originario de este lugar y a quien se le ha considerado como el segundo cronista de Colotlán, después de Fray Francisco Frejes. El texto que hoy es más o menos conocido, incluye una cronología del siglo XIX con interesantes datos que vinieron a enriquecer el conocimiento histórico de nuestra ciudad. Los datos abarcan un período de 1801 hasta 1899. El pergamino menciona antes del prólogo, tener como fuente un documento del citado fraile, que es a su vez cronista del Colegio de Guadalupe, Zacatecas.

Una versión señala que en 1942 es copiado el pergamino por los profesores Francisco Huízar Robles, J. Gertrudis Ramos Estrada, Adrián Huízar Curiel y Carlos Bustos Álvarez; empieza a ser difundido, al principio entre una selecta parte de la población, hoy es casi de dominio público. De hecho, los estudios recientes tienen a este documento como una fuente de notable valor histórico. Una versión más señala que el documento original está en poder de la familia del Sr. Julián Sánchez (+). Lo mejor de tal hallazgo es que hoy conocemos el contenido del mismo.


110 AÑOS DE SERVICIO TELEGRÁFICO EN COLOTLÁN

Fue en 1869 cuando se instaló el servicio de telégrafo en este lugar; ello representó un paso importante a la modernidad y la posibilidad de estar comunicados con lugares distantes. Una noticia comprimida en diez palabras podía ser recibida casi en forma simultánea; todavía hasta hace muy poco era común enviar sentidos pésames o gratificantes noticias por este medio. También era útil para el envío o recepción de dinero.

Hoy desafortunadamente hemos olvidado el uso de este servicio, que, al igual que el correo ven disminuido el número de usuarios. En ambos casos el propósito original era acortar distancias a través de la escritura.


EL CRISTO DEL CIPRÉS

Allá por la década de los treinta cuando: se hizo presente el movimiento cristero, el edificio que hoy ocupa el Colegio Jalisco era un hospital atendido por religiosas; a raíz del citado conflicto el hospital fue saqueado y en terreno anexo que se usaba como potrero se incendiaron diversos objetos. Se dice que entre los escombros fue hallado un Cristo que se llevaron a su casa las señoritas Valen-zuela, éstas vivían a media cuadra del Colegio, por la calle Juárez.

Le dedicaron una habitación que a partir de entonces se usó como capilla y que era frecuentemente visitada no sólo por los vecinos sino también por peregrinos que iban de paso a Temastián.

Se organizaban novenas para pedir por el buen temporal o las necesidades más urgentes de la comunidad, las visitas de devotos se multiplicaron en poco tiempo y de cuando en cuando le velaban toda la noche; también se dice que las personas más piadosas se flagelaban en su presencia. Ya muy enferma una de las Valenzuela le pidió al Sr. Cura Candelario Ayala que recogiera el Cristo y tras ligera restauración fue instalado en el ciprés del templo de San Luis. Años más tarde el Sr. Cura Salvador Sánchez Escobedo lo mandó restaurar de nuevo y le cambió la cruz que es la que actualmente tiene.


MÁXIMA AUTORIDAD COLOTLENSE EN EL SIGLO XVII

Iniciado el siglo XVII y recién fundado Colotlán, la máxima autoridad era el Capitán General y Protector, a quien nombraba el mismo virrey. En teoría tenía poder casi absoluto sobre los colotlecos, no sólo en cuestiones militares sino también en materia política, administrativa y judicial; para tal efecto era ayudado por varios tenientes. El objetivo básico del gobierno de Colotlán era, entre otros, la defensa de la frontera contra incursiones de nayaritas y chichimecas. La Audiencia de Guadalajara carecía de facultades para tomar parte en litigios de Colotlán. Esta forma de gobierno perduró hasta la Independencia sin ninguna alteración fundamental. Este sistema fue invención española, impuesta sobre comunidades dispersas.

El gobierno de la frontera fue eficaz para mantener el control en la población indígena regional. Por otra parte, se promovió la endogamia con el fin de mantener las lealtades comunitarias. Así, factores geográficos, políticos y sociales dieron estabilidad al régimen y seguridad a la frontera española. La lealtad indígena al gobierno español fue reforzada aún más por los privilegios concedidos a los colotlecos en reconocimiento y recompensa por sus servicios milita-res. Contaban entre sus privilegios la exención de pago de tributos, el derecho de portar armas y permiso para montar a caballo y vestir como hidalgos. Los colotlecos formaban parte de una aristocracia indígena muy comprometida con la empresa colonial.


PRIMER AYUNTAMIENTO DE NUESTRO MUNICIPIO

Don Marcos Marcelo Escobedo, insurgente distinguido, fue nombrado presidente del primer ayuntamiento en el año de 1825. Había destacado como Alférez Real y gobernador del barrio de Tlaxcala en 1808; dos años después se declara a favor de la guerra de independencia. En 1811 se entrevista con Miguel Hidalgo de quien recibe órdenes militares junto con el cura José Ma. Calvillo y diez mil indios. A pesar de sufrir la derrota del Puente de Calderón pronto recuperó el entusiasmo por la causa.

Las ideas progresistas de Marcos Escobedo le llevaron a construir el primer edificio del ayuntamiento, llamada entonces Casa de Gobierno Municipal; de igual forma promovió la creación de un rudimentario drenaje. Afectado por la epidemia de cólera morbus en 1833, murió en agosto de ese año sepultándose en el cementerio de San Lorenzo según consta en archivos parroquiales.


COLOTLÁN, UN GOBIERNO INDEPENDIENTE DURANTE MÁS DE 200 AÑOS

A partir de 1591, fecha en que se funda Colotlán como villa española, se instituye en este lugar un gobierno independiente de los virreinatos limítrofes: Nueva Galicia y Nueva Vizcaya. El Capitán Protector y Justicia Mayor era la máxima autoridad en la recién nombrada Frontera de San Luis de Colotlán; dicha autoridad era nombrada por el virrey y su función primordial consistía en proteger los asentamientos españoles de los caminos de la plata, además debía administrar y gobernar a los indios sedentarios que ya habían sido sometidos. El poder civil y militar de la autoridad de Colotlán fue de gran alcance y se mantuvo vigente por más de doscientos años.

Pese a que la jurisdicción del gobierno de Colotlán era espacialmente discontinua, operaba con gran eficacia de tal forma que todavía en 1805 se le reconocía como un gobierno independiente. Fue hasta 1821 cuando terminó el control directo del gobierno central y se designó c Colotlán como sede del Octavo Cantón en el recientemente creado estado de Jalisco, es así como las autoridades civiles de Guadalajara obtienen el control político de este territorio.


COLOTLÁN UNO DE LOS SIETE PRESIDIOS DE LA REGIÓN CHICHIMECA

Recién iniciada la conquista de la región, esta se convirtió en una zona de conflicto en diferentes órdenes: Económico, político, social y religiosos. Lo primero porque las frecuentes guerras generaban gastos cuyo costo nadie quería o podía asumir; en el orden de los políticos no había una figura que centrara el poder y con ello la toma de decisiones para organizar a la población; lo social deriva de lo anterior y se agregó que los movimientos migratorios generaban una dinámica distinta a la observada hasta poco antes. En lo religioso se hicieron presentes los misioneros franciscanos quienes atendiendo a la consigna evangelizadora lograron una mejor acogida.

Estando en conformación una nueva dinámica de relación político-social, se hacía necesario establecer un punto estratégico, estructuras definidas para control tanto de tribus inconformes como de intereses creados a partir de la invasión. Nace así Colotlán como un presidio y adquiere con ello un status sociopolítico regional. De allí en adelante sería un punto de enlace reconocido por la autoridad virreinal y la población comprendida en la región chichimeca. De esta época data la construcción más antigua de carácter religioso en nuestro municipio y que se localiza como parte de una propiedad privada en la zona más céntrica de la ciudad.


LEYENDA DE LA PIEDRA CHINA

Se dice de una mujer que vivía por el barrio de la Piedra China, tenía dos hijos pequeños a quienes dejaba con frecuencia solos para irse a los bailes, también tenía un criadero de marranos. La casa se ubicaba al otro lado del río y en días lluviosos se dificultaba el acceso. Se cuenta que una ocasión, ya muy noche, una creciente del río le impidió volver a su casa. Al día siguiente cuando ya pudo cruzar no encontró a sus hijos; habían sido tragados por los marra-nos. Se dice que enloqueció y desapareció, sin embargo, suele oír-sele por ese rumbo con un llanto lastimero que dice: ¡Ay, mis hijos!

La misma versión dice que el castigo recibido fue quedar convertida en la Piedra China que hoy identifica a un barrio del rumbo sur de la ciudad. De la misma piedra se dice que tiene un tesoro enterrado ya que el tamaño de la misma es el doble de lo que se puede apreciar.


PARROQUIA DE SAN LUIS DE COLOTLÁN, ORGULLO ARQUITECTÓNICO

En el mes febrero de 1722 se colocó la primera piedra de la actual parroquia, uno de nuestros orgullos arquitectónicos y sin duda la mejor de la región. Este acto fue presidido por las autoridades en turno: Capitán Protector y Justicia Mayor de las fronteras de San Luis de Colotlán Dn. Francisco Javier Gatuno Conchuelo Lemus y Granjera, Cura Dn. Miguel Antonio Gómez, Gobernador Indio José Santiago, Capitán de Regimiento Cristóbal Gil, Capitán de Guerra Alejandro Jornes. Estos junto con varios de los principales vecinos del lugar habían acordado desde el mes de enero la construcción.

Habían de pasar ciento cuarenta años para ver concluida dicha obra. La magnitud de la misma hace suponer que fueron necesarias jornadas extenuantes y, sin duda, un diseño bastante preciso para lograr lo que hoy podemos disfrutar.

En junio de 1861 se terminó de construir con sus torres incompletas y fue el 8 de septiembre de 1862 que la bendijo el Cura Dn. Basilio Terán. Fue hasta junio de 1940 que el pintor Gerardo Martínez inicia a decorar el interior; concluye el 31 de diciembre de 1942.


CASA HIDALGO, ESPACIO MULTIFUNCIONAL POR TRADICIÓN

El espacio que hoy ocupa la Casa Hidalgo es algo más que sólo una de las construcciones más antiguas, céntricas y tradicionales de nuestra ciudad, es también en nuestros días un lugar cultural multifuncional. La tradición oral dice que se utilizó como cuartel durante el movimiento revolucionario, sin embargo, hace más de medio siglo ha albergado a instituciones educativas de diferentes niveles: Funcionó como Escuela para Niñas, laboró allí por breve tiempo la Escuela Normal Experimental, muchos años fue la Escuela Preparatoria Regional de la U. de G. y hace diez años inició sus actividades el Centro Universitario del Norte; éste último desarrolló actividades administrativas y docentes hasta que estuvo en condiciones de hacerlo donde hoy está.

La fachada del edificio conserva el estilo mientras que en su interior se ha modificado hasta hacer del mismo un recinto funcional que ofrece áreas para exposiciones, conferencias, talleres y proyecciones cinematográficas. En la puerta de acceso, un poco más arriba del marco de cantera, hay una placa de cantera con una inscripción que dice: 1939. ESCUELA SUP. PARA NIÑAS, MANUEL MARTÍNEZ VALADEZ, COLOTLÁN, JAL.


OFICIO QUE CAMBIÓ CON LA MODERNIDAD

Cuando en casi todas las casas había un pozo de lazo para abastecerse del agua necesaria para consumo doméstico, el oficio de desensolvador era indispensable. Don Rosalio Rosales tenía su prestigio como tal y apenas se daba abasto. El grado de dificultad dependía del diámetro y profundidad del pozo, aunque eso no era obstáculo para él. Había familias que con religiosa puntualidad requerían de sus servicios una vez al año, mientras otras le solicitaban con más frecuencia.

Pero algo más curioso en este oficio era que también desensolvaba letrinas. Cuando el servicio de drenaje no era público, algunas familias instalaban en sus casas un baño que desembocaba en fosas sépticas, que también requerían limpieza. Oficio complicado, pero no menos indispensable y solicitado para el desenvolvador más eficiente de la época. Sin duda que para desarrollar este último había que ser poco escrupuloso mientras que para el primero la condición era no padecer claustrofobia.


MARIO MONTOYA, EL TALABARTERO QUE INNOVÓ EN EL ARTE DEL PITIADO

El arte del piteado ha sido una actividad que nos ha dado fama a nivel nacional e internacional. Esta artesanía generó por varios años una dinámica económica sin precedentes y la proyección alcanzada hizo que Colotlán destacara en el mapa como tierra de artesanos notables. Los modelos elaborados en dicha etapa de bonanza se estandarizaron y lograron una demanda considerable tanto entre la población local y regional como en el ámbito nacional e internacional. Vino luego una sobreproducción y altibajos que el mercado de este arte se contrajo y presentó una crisis.

En el marco de lo señalado, Mario Montoya de la Rosa comenzó a proyectarse con obras artesanales diferentes y de diseños novedosos, algunos de ellos de magnitudes menos convencionales que rompieron con los estilos consagrados hasta ese momento. Bordó grandes cuadros decorativos con imágenes como la Virgen de Guadalupe, Francisco Villa, Un emperador azteca, además de accesorios femeninos y las coronas y cetros de reinas de la feria. Actualmente borda un mural de gran tamaño que estará expuesto en forma permanente en el Centro Universitario del Norte de la U. de G. Las obras que ha hecho y la que está por concluir hacen de Mario un gran innovador en este nuestro arte.


PRIMEROS TALABARTEROS DEL ARTE DEL PITIADO

Es difícil precisar quién y cuándo inició el oficio del piteado en Colotlán, no obstante, sí es posible mencionar a quienes lo impulsaron de tal forma que empezó a ser reconocido como arte. Se afirma que fueron Cruz Fernández (padre), Nicolás Orozco y Amado Núñez los primeros en elaborar artículos de piel con las características que ahora le conocemos. El impulso que alcanzó a partir de la década de los ochenta se debe a la producción de Ignacio Quezada de Luna, los hijos de Cruz Fernández, Felipe Quiñonez y los hermanos Carrera, entre otros. Hay que decir que los de mayor prestigio fueron los de la talabartería Quezada y ello se debió a lo fino de la pita.

Con respecto a los diseños, por muchos años se estandarizaron y es hasta fechas más recientes que se crearon nuevos estilos; destacó en ello los artículos elaborados en taller de J. Guadalupe Lares y posteriormente Mario Montoya. Ojalá que las nuevas generaciones den nuevo impulso a este arte que ya tiene presencia en escenarios internacionales.


ELENITA ÁLVAREZ VELIZ, UNA ENFERMERA POR VOCACIÓN

Elenita, como se le conoce, ha hecho del servicio una vocación y de la enfermería el medio para desarrollarla. A temprana edad comenzó trabajando en el comedor Bienestar Social Rural, un lugar donde se ofrecía desayuno a cuarenta niños de escasos recursos; tenía entonces quince años de edad y trabajó en dicho lugar por tres años. A partir de 1952 ingresó al Centro de Salud Rural donde obtuvo su base y trabajó por un poco más de 28 años hasta lograr su jubilación.

Ofreció sus servicios como enfermera en diversos lugares de la región, no obstante, en Colotlán se le recuerda como una persona muy servicial e incluso no faltó quien confiara más en ella que en los propios médicos. Atendió innumerables partos en domicilios particulares y a casi cualquier hora del día. La mayor fama y reconocimiento lo tiene como partera. Aún después de jubilada continuó muy activa en servicios de enfermería.


IGNACIO QUEZADA DE LUNA, UNO DE LOS MEJORES TALABARTEROS DEL PITIADO

Don Nacho ha sido uno de los artesanos más reconocidos por la calidad de sus productos diseñados con pita fina. Comenzó a bordar desde los ocho años de edad, le enseñó el oficio Don Cruz Fernández "grande". Se distinguió por sus bordados hechos al derecho y al revés además de sus piezas chumiteadas, éstas últimas con adornos de estambre. En su taller se elaboraron portafolios artesanales para miembros del gabinete federal y algunas otras altas figuras del ejército nacional. De igual forma bordó gran cantidad de accesorios para artistas famosos de música mexicana y mariachis de talla internacional. Heredó a muchas generaciones el gusto y preferencia por los diseños en pita fina; se ganó por mucho el reconocimiento como uno de los mejores talabarteros de Colotlán.


LUCES Y SOMBRAS DE UN PERSONAJE DISTINGUIDO

Victoriano Huerta Márquez, el vilipendiado colotlense que con mucha sombra y sin luz ha pasado a la historia, bien merece que se le reivindique al menos en su tierra natal. Razones hay. ¿Qué otro coterráneo, además de él, ha llegado a tener tan altos títulos militares de carácter nacional? ¿Dónde está documentado que él hubiera sido el autor material o intelectual del asesinato que la historia oficial señala? ¿Quién lo tomó de conejillo de indias para cubrir el honor de otra figura política? Si las circunstancias le fueron adversas, es de justicia que hoy, al menos en Colotlán y la región, se difundan los aciertos que tuvo entre los que destaca su perfil de estratega militar que sí está documentado. Él como cualquier figura nacional tuvo errores y aciertos. Estos últimos le hicieron llegar tan lejos que, en una época de caudillos, sobresale por el rango militar que ostenta y le hace llegar a la presidencia del país.


UN PÁRROCO CON NOTABLE SENTIDO SOCIAL

El párroco Timoteo Hernández que laboró en este lugar en la década de los 60's se ganó a pulso el aprecio de gran parte de la población, su servicio no se limitaba a lo religioso, sino que promovió entre la población masculina el gusto por el béisbol. Es a partir de que él organizó la primera liga municipal que se empezó a arraigar ese deporte en este lugar. Algo más, no sólo lo fomentaba en lo local, también le gustaba buscar encuentros con deportistas de municipios vecinos. Su gestión fue decisiva en la adquisición de... 


BASILIO TERÁN, UN BENEFACTOR VISIONARIO

En 1819 llegó a este lugar el presbítero Basilio Terán quien se distinguió no sólo en cuestiones de orden religioso sino también por la promoción de obras de beneficio social. Tocó a él concluir la edificación de la parroquia de San Luis Obispo misma que bendijo el 8 de septiembre de 1862. Fue a iniciativa de él que se fundó el Colegio Terán en el lugar que hoy ocupa la Casa Hidalgo, actualmente propiedad de la U. de G; este mismo edificio ocupó a principios de siglo XX la Escuela para Niñas. De igual forma intervino en la construcción del Hospital Colotlán, hoy Colegio Jalisco.

Su empuje en la promoción de obras de servicio social le hizo ganar el afecto y reconocimiento del pueblo en general. Su muerte ocurrió en este lugar el 30 de noviembre de 1890. Hoy merecidamente lleva su nombre una de las calles más céntricas de esta ciudad y quedan para la memoria las dos fincas mencionadas como testimonio de una mente visionaria que supo aprovechar sus circunstancias.


MIGUEL CALDERA: PIEZA CLAVE EN LA FUNDACIÓN DE COLOTLÁN

Miguel Caldera, capitán español chichimeca, fue pieza clave no sólo en la fundación de Colotlán sino también en la progresiva pacificación de la frontera chichimeca. Este personaje se ganó la confianza tanto de conquistadores como de indios asentados en la frontera; de él se afirma que era "un capitán de grandes sentimientos y voluntad de hierro". A él le fue encargada la villa recién fundada, Villa Nueva Tlaxcala de Quiahuistlán, misma que cuidó hasta su muerte en 1597. Hay fuentes que señalan que le unía un gran afecto por nuestra tierra en la que vivía una hermana y de la que alguna vez dijo quería fuera su última morada.

Fue Miguel Caldera quien dio tierras para la fundación de Colotlán, en su carácter de Capitán y Alcalde Mayor y con el reconocimiento de autoridades virreinales; su intervención daba legalidad al acto señalado. Como encargado de la ejecución de la Real Ordenanza influyó previamente y hasta la consolidación de nuestro municipio como asentamiento reconocido por la autoridad. Su generosidad le hizo ganar estimación entre la población de la región.


COLOLLATZIN, UNO DE LOS PRIMEROS LÍDERES INDÍGENAS

Recién conquistada esta área geográfica surgió Colollatzin como líder indígena que vio con desconfianza a los colonizadores y organizó ataques al presidio de Colotlán y al de Santiago. No le convencieron de todas las razones de fe enseñadas por los frailes y rechazó a los colonizadores. Si al principio estableció algunas alianzas, pronto generó un alboroto que provocó fuga masiva hacia Zacatecas. El líder y sus seguidores se resguardaban en el cerro de Santiago, conocido entonces como El Chichimeco.

De Colollatzin se ha escrito que era un hombre irascible, de pocas palabras y un profundo sentimiento antihispano. Las razones eran suficientes; la cruenta conquista y los actos de sometimiento perpetrados por los españoles iban en contra de todo sentido de humanidad, antes bien eran de una barbarie superior a la documentada por los propios conquistadores.


FUNDADORES DE NUESTRA CIUDAD

Fueron Lucas Téllez y Diego Ramírez quienes tuvieron la iniciativa de solicitar al virrey Luis de Velasco, hijo, permiso para fundar una villa en Colotlán ya que como asentamiento humano no tenía reconocimiento oficial. La solicitud se turnó al Rey de España Felipe II quien meses después emitió una Cédula Real de autorización firmada el 25 de abril de 1589. Fue a finales de 1590 cuando el virrey negoció con líderes tlaxcaltecas y del cual resultó el envío de 932 tlaxcaltecas de los cuales llegaron a fundar nuestra ciudad casi cien entre hombre, mujeres y niños.

El escribano público Manuel Acuña dio tierras para la fundación dando así cumplimiento a la Cédula Real. Se otorgó posesión a los promotores, Lucas Téllez y Diego Ramírez; intervino en el acto Miguel Caldera, figura de importancia regional y Alcalde Mayor de la Villa de Jerez y valle de Tlaltenango. De igual forma legitimó la posesión Fray Antonio Cárdenas, guardián del convento de Colotlán. Esto ocurrió el 21 de agosto de 1591, fecha asentada en el acta de fundación.


DOCTOR LIMONES, UN PERSONAJE ENTRAÑABLE

Llegó para quedarse y convertirse en parte del paisaje urbano; su singular forma de vestir además de sus inseparables castañuelas y su fama como doctor lo convirtieron pronto en un colotlense entrañable. Los rumores sobre su origen fueron diversos, él decía ser un exiliado español y sí que lo parecía; vivió por varios años aquí, pero recorría municipios vecinos ofertando sus conocimientos en cuestiones medicinales. Le hizo famoso su peculiar estilo y su publicación sobre asuntos relacionados con la salud donde difundía sus conocimientos de hierbas medicinales y otros consejos de sabiduría popular. Sus boletines, que eran gratuitos, eran didácticos, pero también graciosos y hasta de aguda picardía.


ARISTOCRACIA COLOTECA: UNA CIRCUNSTANCIA HISTÓRICA

Con la fundación de Colotlán se inicia un período de relativa bonanza político- social para los pobladores indígenas locales, en particular para aquellos que ofrecían servicio militar a favor de la corona; ello se tradujo en algunos privilegios por un período de casi doscientos años. Conforme al proyecto conocido como "La compra de la paz" contemplaba entre otras medidas la negociación con los recién conquistados a quienes se les ofrecía alimentos, ropa y otros bienes civilizados si dejaban las armas y hacían el citado servicio militar.

La lealtad indígena de los habitantes de los pueblos colotlecos (Colotlán, Santa María, Huejúcar, Totatiche y otras 21 localidades) se reforzó por los privilegios citados y se mantuvo así hasta principios del siglo XIX.


EXPANSIÓN URBANA, FENÓMENO MÁS O MENOS RECIENTE

El crecimiento urbano que registra nuestra ciudad se ha hecho más evidente en las últimas tres décadas. Por un lado, se instalaron oficinas dependientes del gobierno federal y por otro se abrieron escuelas del nivel medio superior y superior que atienden a numerosa población regional. La afluencia de personas incrementó la demanda de vivienda y con ello la de otros servicios básicos. Todo ello ha dado lugar a un cambio en la dinámica económica, social y cultural que se traducen a su vez en cambio de hábitos familiares y sociales.

Es inevitable la evolución y desarrollo de nuestra ciudad, no obstante, la expansión urbana trae a la par otro tipo de afectaciones que esperamos poder resolver para mantener el aire de provincia que aún tenemos; la calidez humana es una virtud que hemos de cultivar.


DE MESONES Y DOMINGOS DE MERCADO

"Bajar al pueblo", expresión común hasta casi a finales de los años ochenta. Los domingos era el día señalado para hacerlo. Ya fuera para ofrecer o adquirir mercancías de consumo básico, la población rural se congregaba en el pueblo. Desde temprana hora empezaban a llegar las remudas por las calles que desembocaban en los mesones más conocidos: La Mora, San Nicolás, La Palma, Puerto Arturo, San Luis y El Progreso. Era casi un ritual desde la llegada hasta el regreso de la gente que domingo a domingo venía al pueblo para asistir a misa y hacer su mandado. Algunos llegaban desde el sábado por la tarde. De las mercancías que se traían para ofrecer a los pobladores locales estaban el queso fresco, huevo, escobas popo-otra parte se adquirían productos como verduras, azúcar, harina, telas o artículos de uso doméstico y agrícola. Así, tanto los domingos como días festivos, el pueblo se llenaba de colores, sonidos y sabores.


MES DE MAYO ¡A OFRECER FLORES!

Eran las cinco de la tarde y empezaban a verse desde lejos los grupos de niñas vestidas de blanco que presurosas iban a ofrecer flores. Sin faltar llevaban además del vestido ampón, la corona y el velo en la cabeza, así como una tacita de juguete o tapadera para el agua florida. Las coronas de azahares eran hechas por Mariquita Huízar, esposa del Chato Mateo. Los altares se llenaban con flores traídas de las huertas del Barrio de Chihuahua entre las que se encontraban gladiolas, bola de hilo, margaritas y alcatraces. Los rosarios eran concurridos y hasta avanzada la década de los sesenta se rezaban en latín. Los misterios eran para las flores y la letanía para la perfumada agua florida. Todo el mes de mayo se podía ver este espectáculo con niñas. En el mes de junio tocaba a los niños que también vestían de blanco y llevaban sobre su pecho un listón rojo.


¡ME LAS PAGARÁS CON BAILADAS!

Un refrán y una tradición asociada a la leyenda de San Nicolás es "bailar para pagar la manda'. Es común que el diez de septiembre de cada año, día de la fiesta patronal, acudan los devotos de dicha imagen a bailar para pagar el favor recibido. Si bien ha cambiado el estilo de hacer el paso, la intención sigue siendo la misma: saldar una deuda de honor. De acuerdo con la tradición oral a este santo le gusta que le bailen y los milagros que él hace han de ser pagados así. Por otra parte, el refrán "Me la pagarás con bailadas" es literalmente la sentencia y equivale a la afirmación de que el que la hace la paga. Por tradición, esta fiesta religiosa ha sido la más concurrida y se asocia a la misma el consumo de coyautes, fruto silvestre traído del alto de Totatiche. La recolección, cocción y venta de éstos, aunque desconocida es también una tradición familiar entre los vendedores.


PAPAQUES O PAPAQUIS, LA FIESTA DEL PUEBLO

Fiesta popular que por lo general se organizaba entre el 20 de enero y el martes de carristolienda (un día antes del miércoles de ceniza) Había los caseros y los populares; los primeros eran muy familiares mientras que los otros eran más concurridos por lo que se hacían en lugares más amplios y públicos. El antecedente se generaba por una broma hecha el día 28 de diciembre, día de los santos inocentes.

El día de la fiesta en el punto de reunión se formaban dos equipos; uno del que hacía la broma y otro del que hacían inocente, cada cual con sus respectivos invitados. Unos y otros llevaban una quiligua con cascarones llenos de confeti o harina. También llevaban suficiente pinole en costales de manta y una bandera blanca. En una charola se llevaba la prenda del inocente, colaciones, pinole y un pequeño muñeco. No había que recordar las reglas, eran de dominio público.

En afán de combate se instalaban los grupos en lados opuestos e iban coreando versos a medida que avanzaban al centro como punto de encuentro. En ciertos momentos se lanzaban cascarones y pinole generando una aparente confusión. Continuaban luego entonando en forma alternada versos y encuentros hasta que uno de los equipos se quedaba sin reserva para continuar, Sólo entonces ondeaba la bandera blanca con lo que se declaraba vencido. Luego venía el baile en el que participaban todos los presentes. La música la pagaba el que hacía la broma, a menos que cada equipo llevara sus propios músicos entonces alternaban. Esta tradición se fue extinguiendo porque algunas terminaron en incidentes desagradables o riñas.


LOS PASTORES: UNA FIESTA POPULAR EN EL BARRIO ALTO

Apenas empezaba noviembre y con ello también la organización de ensayos de los pastores que año con año encabezaba Don Ramón Alejo; el punto de reunión era el atrio de San Lorenzo, en el barrio alto. Tarde a tarde se reunían casi siempre los mismos: Miguel Gaeta, Salvador Vázquez, Pablo Salas, José Rivera, Victoriano Ortiz, Alberto Ortiz, entre otros. El día de la presentación se agregaban Enrique o Josecito que tocaban el arpa entre verso y verso de los parlamentos. Unos eran vecinos del mismo barrio y otros del de Chihuahua. Por aquello de los olvidos, se comisionaba a don Gerardo Campos el día de la presentación, su función era de apuntador y lo hacía muy bien.

En dicho atrio había un foro que servía como escenario y que se veía muy concurrido el día señalado para la presentación. Entre el público había hombres, mujeres y niños, aunque estos últimos no aguantaban toda la jornada que se extendía hasta cinco horas.

Regularmente iniciaban a las nueve de la noche, eso sí, al finalizar siempre había cena para todos los presentes, se ofrecían tamales, pozole y buñuelos con el sabor tradicional de la comida casera.


MARTES DE CARRISTOLIENDA, UNA EXPRESIÓN EN DESUSO

Antaño, la celebración de la cuaresma en casi toda la provincia era de solemne recogimiento y guarda, Colotlán también tenía su propio estilo de celebrarlo; el miércoles de ceniza iniciaba con un lapso de 40 días de actividades de orden religiosos que influían en el aspecto social en general.

El martes previo al inicio de cuaresma se le llamaba de carristolienda o carnestolenda. Un registro parroquial que data de abril de 1676, señala esta tradición como contraria a la norma religiosa.

Cita el mismo "suspender la costumbre de poner banderillas en casa de los naturales por haberse reconocido alguna superstición en ellas" La tradición oral señala que todavía hasta mediados del siglo pasado, el martes de carristolienda era fecha límite para realizar los papaques o papaquis.


LA INOLVIDABLE Y YA INEXISTENTE ALAMEDA

Los puntos de reunión social en la provincia han sido por tradición las plazas públicas, así como aquellos construidos ex profeso, y, a ellos se agregan espacios naturales que por su extensión y características representan un espacio propicio y agradable para tal efecto.

En Colotlán lo fue por décadas la Alameda, aquella prolongación hacia el norte de la calle Paseo. Una hilera de frondosos árboles que se conectaban y extendían en frescas y fructíferas huertas de chabacanos, membrillos, granadas, duraznos, limas, naranjas, así como flores de gran diversidad.

Caminatas vespertinas o dominicales, reuniones entre las sombras de las frescas huertas, los populares juegos de olla que por varias décadas fueron promovidos entre la población como pretexto de esparcimiento, tardeadas con o sin música, o el simple deseo de recorrer aquel rumbo del pueblo era sin duda un excelente pretexto para disfrutar la Alameda.

En la semana de feria era obligado el paso por aquel rumbo para ver la exposición ganadera que incluía una muestra de las mejores especies del municipio, no necesitaba uno saber de estos asuntos para quedar complacido con el recorrido.


LOS ALTARES AL ESTILO COLOTLÁN

La tradición de altares en su versión colotlense no tiene mucho que ver con la del mes de noviembre dedicada a los muertos en otras regiones de México. Aquí instalaban el viernes de dolores y eran dedicados a las ánimas de los difuntos de la familia. La costumbre dictaba que habían de ser montados en los zaguanes de las casas y la distribución era más o menos la siguiente: Una mesa cubierta con un mantel, en la parte central se ponía una imagen religiosa y en el resto del espacio se acomodaban flores, veladoras, fotografías de los difuntos.

La gente acostumbraba a elaborar agua fresca y dulces para ofrecer a los visitantes quienes llegaban diciendo "¿llora el muerto?" a lo cual los caseros invitaban a pasar para ofrecer lo que había preparado para ofrenda. También era común que al encontrarse las personas en la calle se hicieran saber "donde estaba llorando un muerto". Las pepitorias era un dulce que se ofrecía en estas fechas.


LA MARCHA DE ZACATECAS: UNA CONVOCATORIA IRRESISTIBLE

Las notas musicales de la marcha de Zacatecas fueron durante tres décadas una convocatoria a la que difícilmente podía alguien resistir. El cine colonial tenía la oferta de diversión para todos los gustos. El tipo de película que se exhibía variaba según el día. Los martes, películas norteamericanas; los jueves los estrenos con reparto de las mejores estrellas del momento; viernes de dos por uno con las mejores películas de la época de oro del cine mexicano; sábados y domingos también de estreno y eventualmente con matiné este último. Entre la primera y la última llamada al compás de la citada marcha, es escuchaban las canciones de los artistas más populares de la época, en tanto apresuraban el paso los convocados para escoger la mejor localidad en el ya legendario Cine Colonial.

Con sonido de altavoz y una forma muy particular de anunciar el reparto estelar, se llenaba todo el ambiente en días de función. Al ser casi la única opción de esparcimiento la asistencia estaba garantizada; en esa época como en todas, las luminarias congregan.

Las anécdotas que se cuentan son numerosas, una de las más populares es aquella que afirma que los jueves eran de pinta, hablando de los jóvenes de secundaria, otra hace referencia a los encuentros amorosos aprovechando la propicia penumbra y qué decir de las expresiones y rechiflas cuando había apagones inesperados, sobre todo si ocurría en las mejores escenas. Algo más, quién no saboreo unas deliciosas semillas de calabaza al mismo tiempo que disfrutaba de una película.


EL JUEGO DE OLLAS, UNA DIVERSIÓN COLECTIVA EN DESUSO

El juego de ollas fue una diversión colectiva que ha desaparecido; esta consistía en lanzar una olla y estar pendientes por si llegaba de regreso para cacharla. Había variedad de formas de jugar, podía ser en líneas o círculo y el número de jugadores variaba según el espacio disponible; por su parte la olla se lanzaba o siguiendo la línea o en dirección indistinta. Eso sí, a quien se le rompiera tenía que pagarla. Los puntos de reunión para el juego eran la ya desaparecida Alameda, La Primavera o el barrio de San Lorenzo. Se dice también que las ollas se hacían en el barrio de Soyatitlán y que estaban más frágiles ya que sólo se sancochaban. Los fondos reunidos por el juego solían ir a obras de beneficencia pública.


PRIMER LUNES DE OCTUBRE; LA ROMERÍA A SANTIAGO

Oscura la mañana del primer lunes de octubre, las calles del barrio alto son recorridas por gente que se congrega por el rumbo del templo de San Lorenzo y la salida oriente de la calle Zaragoza; esto ha ocurrido por varias décadas y en nuestros días no es la excepción. El bullicio tiene el propósito de participar en la romería conocida como "la llevada de la virgen". La imagen de la Virgen del Rosario de Talpa permanece en Santiago durante la mayor parte del año y aunque es traída con menos honores el tercer domingo de junio, su regreso se convierte en una fiesta popular: Procesión, rezos, música, pólvora y, los últimos años, mucho comercio.

Hasta no hace mucho era un día de reunión familiar o comunitaria, se iban familias completas desde temprano y llevaban consigo alimentos para el almuerzo y comida, regularmente era un platillo especial que se compartía en sombras de árboles en los alrededores de Santiago. Solía haber juego de beisbol y concluía el día con un baile popular. Hoy el abundante comercia abarrota las calles principales y son pocas las familias que continúan con la tradición de pasar allá todo el día.


SANTIAGO Y SUS CARRERAS DE POLLO

Hay tradiciones que el paso del tiempo consolida, modifica o desaparece. Las carreras de pollos en Santiago se siguen realizando, aunque con menos difusión y asistencia que antes. Esta peculiar diversión donde los menos afortunados son los pollos, se sigue celebrando el día 25 de julio día de Santo Santiago. Los aficionados se reúnen en el lugar conocido como carril y montados en remudas van dispuestos a forcejear con el contrincante por la posesión del ave que se convierte a su vez en el mejor trofeo por su destreza.

Las reglas no están escritas porque los que asisten las conocen bien; para los participantes es necesaria buena dosis de adrenalina ya que conforme a la propia tradición hay que montar a pelo y, desde luego, tener un buen equilibrio. Los percances, que no han faltado, han sido menores por lo que la costumbre continúa.


DE GRITONES Y RECUERDOS QUE PROVOCAN

La provincia mexicana se ha distinguido por tener, entre otras cosas de sus peculiaridades de carácter social, la existencia de personas que por su oficio cotidiano le imprimen un estilo único al diario vivir. Estos personajes tan públicos como indispensables día a día van por las calles del lugar ofreciendo sus mercancías o servicios en forma de pregones. El evocar los gritos nos remite sin duda a una época distante o cercana, pero con un inigualable sabor de lo propio.

Es por ello que vienen a continuación algunos pregones que han sido grabados en la memoria de algunos de los colotlenses que gustan de hablar del terruño querido:

¡Nieveeeeeeee! (Jesús Agudo)

¡Tunas frescas! (Rutia)

¡Sandía fresca y azucarada, sin nada de azúcar! (Rito Carrera)

¡L'agua fresca de cebada, l’agua!

¡Leña, no compra leña! (Eliseo Flores)

"Agua quién compra un cántaro de agua! (Lucio Pinedo)

¡Algo que soldar, el soldado000ooooor!



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Por: José Alonso Serrano Campos SERÁ EL SERENO Aunque la expresión tuvo origen en las calles del México del siglo XIX, la historia empieza s...